El pleno
municipal de hoy ha finiquitado el fallido proyecto del hotel Moneo.
Han
sido muchos años de lucha, desde que en el ya lejano 2010, un minúsculo grupo de ciudadanos decidimos unirnos y trazar una línea roja y oponernos frontalmente a todo el sistema
político-urbanístico malagueño, creado al calor de la burbuja
inmobiliaria.
Era una época donde la piqueta campeaba a sus anchas por el
centro, después de haber arrasado hasta sus cimientos todos los barrios
históricos malagueños, por cierto, sin ninguna oposición. Con esta
operación pretendían abrir las puertas a la demolición de lo poco que
aún quedaba de histórico en nuestra ciudad. Como era de esperar, lo
tuvimos todo en contra: defensor del pueblo andaluz, periodistas, tertulianos, colegio de
arquitectos, partidos políticos mayoritarios, asociaciones de vecinos y
culturales, incluso buena parte de los malagueños, que se creyeron el
cuento de la lechera del hotel que generaría decenas de empleos... Y aún
así nunca dejamos de pelear. Poco a poco, con más esfuerzo que medios,
conseguimos cambiar la tendencia general. Hoy la Mundial sigue en pie y
los malagueños la han hecho suya. Esperemos que esta lucha sirva como
ejemplo para no dejar de pelear por causas nobles, aunque parezcan
perdidas de antemano.
Queremos aprovechar para agradecer a todos los que ,de una u otra
manera, han contribuido a salvar la Mundial, símbolo nacional del patrimonio
amenazado.
Ahora solo queda restaurar el edificio y recomponer la manzana, para que toda la zona recupere la vida que le robaron.
Pero eso ya, es otra historia...